domingo, 3 de agosto de 2008

Avanzamos por la colina

Avanzamos por la colina el viento nos empuja suavemente

si no supieras que vengo de allá que el dolor también atraviesa la islas

aquí poco queda

hay hambre de entrar por los espejos una dulce Alicia que cae y cae

quizá me detenga en la curva más arriba de donde las mujeres siembran lavanda mi mano toca sus puntas olorosas

algo parecido a una canción suena en algún lado o en la memoria

quizá la brisa sobre la hierba mi pelo moviéndose parece un pájaro perdido en este extraño paisaje. .

2 comentarios:

  1. Hay hambre de entrar por los espejos. ¡Qué fuerza tienen estos versos!

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  2. Que lindo, me traslado hasta alli y lo veo todo...

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