lunes, 24 de septiembre de 2012

Una carta de amor embarrada de boloñesa


Hace dos viernes fui a ver la última película de Woody Allen: A Roma con amor (2012). Mi veredicto es que es decepcionante, aunque no llega al nivel tan malo como el de Vicky Cristina Barcelona (2009), la película es irregular, llena de tópicos, con actuaciones insulsas y salvada solo por algunos momentos que siempre aporta la veteranía del director.



Juro que comencé la película con entusiasmo, con ganas de que me gustara, escuchando y viendo a un narrador (un policía de tránsito) que no termina por hilar las diversas historias que componen la película y que luego aparece al final, cuando ya lo había olvidado completamente. El chiste fácil: el acentazo italiano al hablar inglés: primeras risas.

La verdad es que por muy director que sea Allen (todos los imaginamos cultísimos, no sé por qué) sus películas europeas (Barcelona-Asturias, París y Roma) no dejan de ser postales llenas de tópicos enviadas por un primo paleto (pero con algo de dinero) de Oklahoma.

Siempre he afirmado que es un gran director de actores, pero en esta película pareciera que la pereza le supera. A ello se le suma algunos fallos de casting, por ejemplo la joven y talentosas Ellen Page podría pasar por cualquier aspirante a actriz, de acuerdo, pero de ¿Femme fatale?, la verdad cuesta creérselo con esa cara de niñita eterna. Obviamente, Judy Davis está estupendísima y, por otro lado, el mismo Woody Allen está especialmente insoportable, haciendo muecas exageradas y predecibles de gags más que vistos, como el almuerzo con  los futuros consuegros en la terraza del apartamento. A Penélope Cruz el director la pone en otra versión de su personaje histérico y sexual de Vicky Cristina Barcelona, esta vez encarnado en una prostituta. Del reparto italiano cabe destacar la actuación de Flavio Parenti, muy creíble y fresco.


De todas las historias, la más lamentable es la que protagoniza Roberto Benigni. Es el truco sacado bajo las chistera, con intenciones de profundas críticas y termina siendo otro tópico más: la absurdidad de la fama alcanzada fuera del talento.



El relato del enlace de la familia americana con la italiana por momentos puede ser gracioso, pero termina siendo predecible, incluyendo también el padre tenor cantando bajo la ducha: más risas fáciles.

En la historia del joven arquitecto que vive con su novia Allen juega con el surrealismo paralelo al Sueño de una noche de verano. Pero una vez más, sabemos de antemano qué va a suceder, no hay espacio para la sorpresa. En cuanto a la historia en la que aparece Penélope Cruz, ella está muy bien en su papel, la verdad es que el chiste de la prostituta en un contexto social diferente, lo hemos visto miles de veces. Borat lleva una a prostituta a como acompañante a una cena en un pequeño pueblo americano y el mismo Woody Allen lo hace en la excelente Deconstruyendo a Harry (1997), cuando recoge a una prostituta para que le acompañe a recoger un premio que su universidad le va a otorgar.



La película a medida que avanza va a peor, se vuelve más insoportable y se salvan algunos momentos y algunas miradas hermosas que se posan en la ciudad al atardecer: pero es Roma.

Y no puedo más que coincidir con el crítico Rex Reed del New Yorker Observer que apunta: "Toda la película da la sensación (y sin mencionar los diálogos tramposos) de una idea que anotase en el reverso de un menú de la Piazza Navona antes de echarse una siesta, y que luego rodó antes de que el guión estuviese bien afinado". Es la misma idea que me vino con Vicky Cristina Barcelona, me lo imaginaba entre vinos, restaurantes y tapas, anotando en las servilletas ingeniosas ideas. Lo mismo pasa con esta, sin duda.


Para cerrar, dejo la crítica de Reed, que empieza y termina de esta forma, la cual resumo en un par de líneas: "Grandes talentos... merecen un día de descanso... Es el momento de empacar las Vuitton y volver a casa, Woody. Tus inspiración es escasa y has tenido un mal día".



12 comentarios:

  1. Para mí, las mejores películas de Woody Allen son las de antes. Las de ahora, algunas son pasables y otras, infumables, como 'Vicky-Cristina-Barcelona', que no deja de ser una postal de Barcelona y que lo mejor que tenía era la cancioncilla de la banda sonora. Yo no tenía muchas esperanzas puestas en ésta, pero ahora, menos aún.

    Un abrazo

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  2. Lo que pasa con estos mitos de la dirección es que parece que si te gusta el sello que llevan, te tienen que gustar todas sus películas. Los directores también tiene malos días, películas, años, trayectorias decadentes...

    No es fácil reinventarse a sí mismo.

    Tras leer tu crítica no creo que la vea ;)

    Un beso, Clau!

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  3. Dorothy, totalmente de acuerdo, aunque Match Point me pareció excelente.

    Jaja, David, la verdad que una mala película de Woody Allen a veces es mejor que muchas de la media de la cartelera, jaja.

    Saludos

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  4. Ay Claudia, no dejas resquicio a la réplica. Yo no la he visto, pero me quedo con la frase que le dices a David: "una mala película de Allen a veces es mejor que muchas de la media de la cartelera" y remarco lo de "media de la cartelera". Quizás esperamos mucho de Woody, pero bueno, ya digo que no he visto esta peli, seguramente la veré, aunque tendré que vencer el prejuicio de la decepción, ya que tu criterio me es muy válido. La de Paris a mi sí me gustó, tenía muchos matices que me gustaron, yo la salvo.
    A ver si vuelvo cuando vea la peli y te doy la razón.
    Un beso.

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  5. Todavía no he pasado a verla Claudia, parece que Allen nos da una de cal y otra de arena y alterna películas flojillas con otras mucho mejor planteadas.

    Qué gracia me ha hecho lo de presuponerlo intelectual, qué gran verdad, es un tipo que cae bien por aquí, sin olvidar que muchas de sus película tienen unos guiones maravillosos y un reparto de actores increíble, pero te secundo totalmente en esa estampa tópica de Europa que viene retratando en sus últimos trabajos, no sé qué le ha dado :-). A mí me gusta el Allen americano 100% en temática y en escenario (salvo Match Point que me parece una obra maestra), ese que se mueve como pez en el agua en las calles de Manhattan y los efluvios de Broadway. Un abrazo

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  6. Sí, Viena, ve a verla, hay cosas divertidas y otras para mí desesperante y cansina. La de París no me gustó pero tampoco me disgustó.

    Delikat, toda la razón, por eso sigo a Allen, esperando a la de cal con su talento. Muy de acuerdo con esa excelente película que es Match Point, ahí acabó su inspiración a este lado del continente ¿Hará una en China?

    El crítico de EL País, que le ha gustado (no Boyero, of course) dice "que Allen no le intenta vender la moto a nadie" y no estoy de acuerdo, porque precisamente en Match Point no hay una intención de postal, hay una buena historia, en estas otras sí, sin duda.


    Abrazos a ambas

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  8. La verdad es que, yo, de Woody Allen lo veo todo y me gusta todo (con graduaciones, por supuesto). Midnight in Paris es la que más me gustó de toda la serie europea y la de Barcelona, la que menos (incidentalmente, en mi curso de fotografía, todo el mundo se puso a hacer fotos en celuloide tras ver la película). Por eso, a pesar de todo, no me la pienso perder.

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  9. Soy igual que tú, Sorokin, voy a ver incluso las que me advierten que son malas, de Woody, te entiendo-
    Saludos

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  10. Claudia, vengo del cine de ver la pelicula y tengo que darte totalmente la razón, me ha parecido mala no, malísima. No sé qué ha querido hacer aquí Woody Allen, pero apenas rescato cuatro cosas y son refritos de otras películas.
    Ni siquiera como postal tiene fuerza, ese roce íntimo que se da entre París y el espectador, aquí no lo he visto con Roma. No me ha gustado nada, ni Penélope, ni lo que cuenta ningún personaje y si no cae en lo insufrible total es por algún que otro ratito de interpretación, como la de Ellen Page, que yo no creo que pretenda ir de mujer fatal, sino más bien de modosita perversa, que eso lo hace muy bien y es donde encierra toda su sensualidad.
    Bueno, quería decirte que tenías razón y que aunque a Woody Allen hay que verlo, en esta ocasión, decepciona.
    Un beso.

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    1. Viena, querida, muchísimas gracias por el feedback, que siempre es necesario para ponderar los razonamientos y pasiones que a veces trae una crítica.
      Realmente llegó un momento que me pareció, tal como tú dices: insufrible. Lo de Ellen Page, tienes razón, has dado en el clavo, yo decía lo de femme fatal, porque la amiga la describe así antes de aparecer..
      Me alegra que hayamos coincidido y me alegra que hayas vuelto para dejar tu opinión después de visionarla.
      Abrazos y buena semana

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  11. Yo creo que Claudia ha sido hasta benigna en su crítica. La película es una auténtica castaña, que me perdone el genio de Woody Allen. Convierte a Midnight in Paris en cuasi obra maestra. Me parecen la mayoría de interpretaciones exageradas, las situaciones tópicas, la reiteración insoportable (la trama de Benigni y la del cantante de ópera en la duca), la música mala y, como dice Viena, ni tan siquiera hay ese placer de contemplar la sin par Roma, que sí se podía apreciar un poco en 'Vicky, Cristina…' (con Barcelona) y en la última con París. Desde luego a mil años luz de distancia de 'Match point', que cada día parece más el canto del cisne de Allen. Y después del mazo, que conste que seguiré yendo a ver sus nuevas películas cada vez que se estrenen. Woody nos ha dado tanto que hasta le perdonaría que hiciese Transformers 4.

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