domingo, 13 de diciembre de 2009

La perversión acallada: 'La Cinta blanca'




La cinta Blanca- Una historia alemana de niños* (Das Weisse Band -Eine deutsche Kindergeschichte) del veterano director austriaco (aunque nacido en Múnich) Michael Haneke se hizo ayer con el galardón como mejor película europea, al mejor director y mejor guión, otorgado por la Academia Europea de Cine. Ya el director había recogido, este año, la Palma de Oro en Cannes a la mejor película.


Sin duda, el galardón es más que merecido. La película, que demás posee una fotografía de lujo, narra la historia de un pequeño feudo alemán, poco antes del inicio de la Primera guerra Mundial. Haneke nos va presentando la historia como si llegásemos en ese momento al pueblo. Con la misma inocencia o ignorancia de un recién llegado, asistimos como observadores a la vida de campesinos y demás pobladores dentro de un mundo familiar y rural  predecible. Poco a poco, los hechos, a veces, en apariencia accidentales, otros desconcertantes, se van sucediendo, y se nos va revelando los pormenores de esta comunidad. Como si nos hubiésemos instalado en la aldea, nos vamos enterando de lo que sucede dentro de las casas, perfilándose sospechas, todo se va volviendo más agrio y doloroso... pero sobre todo, hay una negación rotunda de todas las partes, debida a sus propios egoísmos e intereses.



Un personaje clave es el párroco, hombre severo y con una numerosa familia. La represión y el castigo es una amenaza constante. Pero él tan solo es un reflejo del prototipo de padre de familia del pueblo, como líder espiritual que es. Ciertamente, puede leerse como una metáfora de lo que, pudiera haber servido de semilla y modelo, para lo que luego fue el horror de la Segunda Guerra Mundial y el holocausto: todos sabían de cierta forma lo que ocurría, pero nadie (o casi nadie) se atrevió a desafiarlo.

Una película magnífica y agria, que es toda una cátedra de buen cine. Hay que verla.

Trailer con subtítulos en inglés



*Traducción libre que he hecho del título.

Pequeño comentario acerca de los premios de la Academia Europea:

La verdad coincido casi siempre con este galardón, que parece querer mantener su prestigio, premiando a películas como ésta. Este año competían películas de gran calidad y directores que me gustan especialmente, como: Fish Tank, de mi querida directora inglesa, Andrea Arnold, y Un profeta, del talentoso Jaques Audiard, entre mis predilectas.
En la categoría de mejor actriz, Penélope Cruz quedó desplazada por la maravillosa Kate Winslet, por su papel en El Lector.
Y como reconocimiento a sus logros y carrera dentro del mundo del cine, dos merecidos premios: por un lado, Ken Loach, como director y la maravillosa Isabel Hupert, sin duda la mejor actriz europea, y la mejor de su generación.
Alberto Iglesias también recibió un merecidísimo premio al mejor compositor, por su trabajo en Los Abrazos rotos.